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Manta para bebé
Durante un día un poco fresco, en el cochecito o en el coche en el grupo 0+ cuando el bebé está dormido o simplemente para crear un espacio confortable, nuestras mantas para bebé son muy suaves, bien calentitas y actuales. Se utilizan diferentes materiales, en franela, en punto para un efecto tricot, a menudo bi-materia y reversibles nuestras mantas calentarán al bebé para un confort máximo. De diferentes tamaños, encontrará sin duda la que convendrá a su bebé.
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¿A partir de qué edad puede un bebé dormir con una manta?
Se recomienda esperar a que el bebé tenga al menos 18 meses antes de utilizar una manta o un edredón para el sueño nocturno. Antes de esta edad, el uso de un saco de dormir con breteles es preferible para evitar los riesgos de asfixia o de sobrecalentamiento. Una vez que el niño es capaz de descubrirse solo, generalmente alrededor de los 18 meses, una manta ligera puede introducirse bajo supervisión.
¿Cómo mantener una manta para bebé?
Para mantener una higiene óptima:
- Lavado: Lave la manta regularmente en la lavadora a 30 o 40°C, según las instrucciones
- Secado: Privilegie un secado al aire libre para preservar las fibras.
- Evite: Los suavizantes y la limpieza en seco, salvo indicación contraria, para no alterar las propiedades del tejido
Un mantenimiento apropiado prolonga la vida útil de la manta y asegura el confort del bebé
¿Qué precauciones tomar al utilizar una manta para bebé?
Para garantizar la seguridad de su hijo:
- Tamaño adaptado: Elija una manta de dimensiones apropiadas para evitar que cubra la cara del bebé.
- Posicionamiento: Coloque la manta bajo los brazos del niño, metiéndola bien bajo el colchón para limitar los movimientos.
- Vigilancia: No deje objetos adicionales (peluches, almohadas) en la cama que puedan presentar un riesgo de asfixia.
Estas medidas contribuyen a un sueño seguro y confortable para su bebé.